Asesino en potencia

Fuera del edificio, donde se encuentra nuestro departamento, hay una gigantesca y milenaria araucaria, bueno puede que no sea milenaria pero es lo bastante grande para parecerlo, que está plantada cerca de los estacionamientos de visitas, los cuales más que las visitas los usan los propietarios que les da lata entrar con su auto al estacionamiento o por aquellos tipos vivos que los dejan en las mañanas para poder irse en metro al trabajo ya que la estación está a la vuelta de la esquina.

Un dia venia llegando de la oficina y me encuentro que tenian un sector de estos estacionamientos totalmente acordonado (con un auto estacionado y un par de espacios libres); me pasó por la mente todo tipo de tonteras, desde algun tipo de asesinato o delito grave, hasta que por estar arreglando las cañerias los tipos hubieran dejado una caga de proporciones.

Me estaciono, y como vi a un par de conserjes cerca del área de desastre, asi que como todo buen copuchento chileno, fui a preguntar que onda ... si más que mal soy parte de la comunidad del edificio y cualquier tipo de problema tambien me atañe a mi , o no?

Pregunto y me cuentan que lo que en realidad pasaba es que al auto que esta estacionado adentro del perimetro cercado, le habia caido una de las piñas verdes de la araucaria, la cual tenian a un lado en el piso, y que le habia dejado el medio abollón en la parte del techo en la puerta (adjunto Fotos 1 y 2 como pruebas del delito)

Las cago el medio abollón!! y en una parte que igual debe ser de las más firmes del auto.
Así que como aun habían 2 piñas colgando de las alturas, para evitar futuros accidentes dejaron un área de seguridad.

Inmaginen que van caminando por un bosque de araucarias en el sur y les cae una de estas piñas de unos 3 a 4 kilos desde una altura de unos 7 metros en la cabeza; osea peor que a la mina que le cayó la bola de espejos en la Murano ....

O inmaginen a los Araucanos dejandolas caer sobre los pobres españoles ja ja ja....

En fin solo puedo decir que nuestro árbol nacional sabe defenderse de la maldita ciudad.